El monstruo de colores

Esta semana compartimos un interesante material que servirá de recurso didáctico no solo en las aulas de educación inicial, sino también en los primeros años de la educación básica. Se trata de una versión para kamishibai del conocido cuento "El monstruo de colores", con el que se puede trabajar la educación emocional de manera lúdica y comprensible para los niños y niñas. El Monstruo de Colores, originalmente escrito por Anna Llenas, es un cuento que narra la historia de un monstruo que ha despertado con sus emociones confundidas, no sabe muy bien qué le pasa, se ha hecho un lío con las emociones revueltas. Por suerte, su amiga le ayudará a identificarlas, describirlas y asociarlas con un color, para poder ordenarlas posteriormente en diferentes frascos. La última de las emociones quedará en el aire, para que sean los pequeños lectores los que averigüen con qué sentimiento se corresponde. Sin duda alguna, El Monstruo de Colores puede ser una herramienta muy útil para trabajar la inteligencia emocional de los niños y niñas, ya que les ayuda a expresar sus sentimientos sin miedo, a identificar como se manifiesta cada uno de ellos y cómo los hacen sentir. Además favorece que puedan ordenar la confusión que a veces pueden tener respecto de lo que les pasa y que en ocasiones da lugar a lo que llamamos «rabietas«, entonces permite validar los sentimientos y emociones infantiles, mostrándoles que nos interesa y haciéndoles ver que la mejor manera de gestionar sus emociones es entenderlas, conocer cuál es su origen y cómo nos transforman. El Monstruo de Clores que compartimos es una versión para Kamishibai, creada por Joanna Sanz. Kamishibai en japonés, quiere decir “teatro de papel”. Es una forma de contar cuentos muy popular en Japón, que suele estar dirigido a niñas y niños pequeños que van a disfrutar de él en grupo. Dadas sus características es utilizado como recurso didáctico. Está formado por un conjunto de láminas que tiene un dibujo en una cara y texto en la otra. Su contenido, generalmente estructurado en forma narrativa, puede referirse a un cuento o a algún contenido de aprendizaje. Como el texto está en la parte posterior de las láminas el kamishibai siempre necesita un presentador o intérprete que lea el texto mientras los espectadores contemplan los dibujos. La lectura del kamishibai se realiza colocando las láminas en orden sobre un soporte, teatrillo de tres puertas que se llama «butai», de cara al auditorio, y deslizando las láminas una tras otra mientras se lee el texto. El kamishibai surgió en Japón, durante la crisis económica de finales de los años 20, como una fórmula para combatir el desempleo. Fascina a la audiencia, ya que une la magia de las palabras con el encanto de las imágenes captando la atención de todos, especialmente de los más pequeños. El componente teatral del kamishibai transciende a la simple lectura, ayuda a conseguir un efecto mágico y de concentración en torno al cuento mucho más fácilmente que con otras técnicas. Fuente: Sanz, Joanna (2017) Kamishibai. Blog del proyecto Kamishibai. El monstruo de colores, los ha perdido. España. Recuperado de https://kamishibai.educacion.navarra.es/