Gestión de aula: 14 Recursos para conectar con tus alumnos

De un tiempo a esta parte se ha instalado la idea de que no hay comunicación efectiva sin emoción. Comunicar emocionando a tus alumnos es actualmente uno de los muchos retos a los que te enfrentas como docente. Es por ello que a través de este artículo se dan a conocer 14 recursos, pautas o ideas que pueden serte de utilidad para conectar con tus alumnos. Este escrito está basado en buena medida en el libro El Profesor Emocionalmente Competente, de Joan Vaello. Un libro cargado de soluciones en lo referente a la gestión de aula.

Gestión de aula. La importancia de la comunicación con tus alumnos

Como se ha dicho anteriormente, la escuela de hoy no puede separar comunicación, enseñanza y emoción. Gestionar un aula se ha convertido en la gestión de emociones, en la gestión de conflictos, en la gestión de la resolución de problemas. Y para ello es imprescindible partir de algunas pautas efectivas que permitan optimizar, de la mejor manera posible, las relaciones interpersonales. En esta línea, Joan Vaello propone una serie de estrategias que destacan por su sencillez, pero que a la vez resultan tremendamente efectivas.

14 Estrategias para mejorar la comunicación con tus alumnos

1. Practica la escucha activa. Deja que tus alumnos expresen sus emociones, preocupaciones, problemas. Y hazlo con una actitud proactiva, es decir, dejando de hacer lo que estuvieras haciendo, mirando a los ojos a tus alumnos, asintiendo con la cabeza y poniendo la máxima atención sobre aquello que te están comunicando. Así lograrás no solo una escucha activa, sino también empática. 2. Fomenta la alegría y el humor. La comunicación también puede darse fomentando la participación por algo que te alegra, por algo que alegra a tus alumnos. Y para ello sírvete del humor como técnica para lograr distensión. 3. Alaba centrándote en la conducta de tus alumnos y critica a partir de la observación y sin perder de vista que un problema puede ser visto también como una oportunidad. 4. Evita lo que se denomina vacíos de comunicación, es decir, evita períodos prolongados en el aula sin conversar con tus alumnos, sin alabar un logro, sin atender a una queja… 5. Evita al máximo las explicaciones prolongadas, es decir, el abuso de la clase magistral. Por tanto, sé breve en tus explicaciones. Sobre la diferencia entre explicar y enseñar, te remito a la lectura del siguiente artículo. 6. Evita que tu tono de voz refleje estrés y ansiedad. De lo que se trata es de llegar a tus alumnos mediante un tono de voz relajado, pero a la vez firme. ¿Por qué? Porque de esa manera el mensaje que quieras transmitirles tendrá la calidez de tu voz y la contundencia de tu argumento. 7. En lugar de juzgar a tus alumnos, trata de describir con detalle y de manera asertiva la situación comunicativa relacionada con un conflicto. 8. No pretendas tener siempre la última palabra, no pretendas ganar siempre. También hay parte de victoria cuando uno cede ante el otro. Y si no, recuerda esta cita:

“Si abordas una emoción como asunto de vida o muerte, morirás muchas veces” (Adam Smith).

9. Ten en cuenta que hay conflictos que no se pueden resolver desde la inmediatez. Hay conflictos que solo el tiempo es capaz de resolver. 10. Promueve el reconocimiento y el agradecimiento a la hora de consolidar un cambio en positivo. 11. Procura en todo tener una postura de respeto hacia tus alumnos para que así, en el momento que lo necesites, puedas exigir el mismo respeto a cambio. 12. Interésate por tus alumnos mediante el uso de preguntas abiertas. Con ello lo que lograrás es establecer un lazo con un alto contenido emocional porque a tus alumnos les estás dando lo más preciado que puede dar un docente junto con los conocimientos y valores: tu tiempo. Sobre cómo formular preguntas abiertas te remito al siguiente enlace. 13. Aprende a distinguir entre las pausas y los silencios. Usa las pausas cuando quieras incitar a la reflexión, sin que estas se conviertan en largos períodos de silencio. 14. Ten presente a la hora de comunicarte con tus alumnos no solo los refuerzos verbales (halagos, llamar a tus alumnos por su nombre, mantener un diálogo fluido y distendido), sino también los refuerzos no verbales (distancia, gestos de aprobación, sonrisa, contacto visual) La comunicación en la gestión de aula: una oportunidad para ser. A modo de conclusión. Cuando se habla de comunicación en muchas ocasiones no nos damos cuenta de que comunicar tiene mucho de escucha activa, de escucha empática. Porque lo importante de la comunicación radica en escuchar lo que no se dice. Y ahí radica el éxito de lo que se denomina la comunicación emocional, aquella que pone los cinco sentidos en el otro. Aquella que transmite desde la sinceridad, sin renunciar a sus derechos. Aquella que, cuando es preciso, sabe ser asertiva, pero también fomenta el agradecimiento y el humor.     Fuente.