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Diez recomendaciones para estudiar a distancia durante la emergencia del coronavirus

31 Mayo, 2020

Actualmente la mitad de la población estudiantil del mundo, más de 850 niños y jóvenes, no asiste a la escuela debido a los cierres de emergencia realizados por los Gobiernos para evitar la propagación del coronavirus COVID-19, esto según lo informado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO. Este escenario sin precedentes por su escala y rapidez, ha obligado a los países a buscar soluciones que permitan continuar la educación pero de manera remota, la mayoría de las veces con herramientas tecnológicas que permitan realizar clases virtuales, de manera de asegurar que no se interrumpa el aprendizaje, pero sin arriesgar a los estudiantes ni docentes y contribuir a contener la cadena de transmisión del coronavirus.

Como respuesta inmediata a los cierres masivos, la UNESCO ha establecido un grupo de trabajo para brindar asesoramiento y asistencia técnica a los Gobiernos que se trazan el objetivo de proporcionar educación a los estudiantes fuera de la escuela. Además, la agencia de la ONU ha echado a andar una coalición mundial que reúne a socios multilaterales y al sector privado, entre ellos Microsoft y GSMA, para ayudar a los países a desplegar sistemas de aprendizaje a distancia a fin de reducir al mínimo las perturbaciones educativas y mantener el contacto social con los estudiantes. El propósito central es siempre cuidar la salud y la vida de la personas, pero haciéndose cargo de dar continuidad al proceso educativo de los estudiantes que cursan los diferentes niveles, proporcionando alternativas adecuadas al contexto.

En el siguiente apartado compartimos algunas de las recomendaciones que ha emitido la ONU a fin de garantizar la continuidad del aprendizaje durante el cierre de las escuelas. En definitiva están destinadas a proporcionar una educación a distancia de la mejor calidad posible, pero con los resguardos que las clases virtuales requieren para que se desarrollen en el marco de valores sociales como el respeto, la diversidad y la seguridad de las personas. Entre las recomendaciones se mencionan algunas que tienen que ver con: escoger instrumentos pertinentes, atender a la inclusión, cuidar la privacidad de los datos, apoyar en el uso de herramientas digitales, considerar las capacidades de autorregulación de los alumnos, crear comunidades, entre otras.

Recomendaciones
La UNESCO también emitió las siguientes recomendaciones para garantizar la continuidad del aprendizaje durante el cierre de las escuelas. 

1. Examinar el estado de preparación y escoger los instrumentos más pertinentes 
Optar por la utilización de soluciones de alta o débil tecnología en función de qué tan confiable sean el abastecimiento de energía y el acceso a internet a nivel local y de las competencias digitales de los docentes y alumnos. Puede tratarse de plataformas de aprendizaje digital, lecciones por video, cursos masivos en línea, e incluso de la difusión de los cursos mediante cadenas de radio y canales de televisión.  

2. Garantizar el carácter inclusivo de los programas de aprendizaje a distancia 

Aplicar medidas para garantizar el acceso de los alumnos, fundamentalmente los discapacitados o los que provienen de familias de ingresos bajos, a los programas de aprendizaje a distancia, en caso de que no todos dispongan de dispositivos digitales. Considerar la posibilidad de transferir temporalmente este tipo de dispositivos de las salas de informática a las familias, proporcionándoles un acceso a internet.  

3.     Proteger la privacidad y la seguridad de los datos

Evaluar el nivel de seguridad durante las descargas de datos o de recursos pedagógicos en los espacios de la web y al transferirlos a otras organizaciones o personas. Velar por que la utilización de las aplicaciones y plataformas no afecte la privacidad de los datos de los alumnos.  

4. Aplicar soluciones a los problemas psicosociales antes de impartir la enseñanza 

Movilizar los instrumentos disponibles para crear vínculos entre las escuelas, los padres, los docentes y los alumnos. Crear comunidades para garantizar las interacciones sociales regulares, dar prioridad a las medidas de protección social y responder a los problemas psicosociales que los alumnos pueden encarar en situaciones de aislamiento.  

5. Planificar el desarrollo de los programas de aprendizaje a distancia

Organizar mesas redondas con las partes interesadas para examinar la duración del cierre de los centros escolares y determinar si el programa de aprendizaje a distancia debe centrarse en la enseñanza de nuevos conocimientos, o más bien reforzar los ya adquiridos durante las lecciones precedentes. Organizar los calendarios teniendo en cuenta la situación de la zona afectada, el nivel de enseñanza, las necesidades de los alumnos y la disponibilidad de los padres. Escoger los métodos pedagógicos adecuados, en función del contexto con respecto al cierre de las escuelas y la cuarentena. Evitar los métodos pedagógicos que requieren una comunicación presencial.  

6. Proporcionar a los docentes y alumnos asistencia en cuanto a la utilización de las herramientas digitales

Organizar sesiones cortas de formación u orientación para los docentes y los padres en caso de que requieran seguimiento y acompañamiento. Ayudar a los docentes a garantizar las condiciones materiales necesarias para la continuidad del aprendizaje, por ejemplo, soluciones en la utilización de los datos móviles con miras a difundir los cursos en directo.  

7. Combinar los enfoques adecuados y limitar la cantidad de aplicaciones y de plataformas 

Combinar los instrumentos o los medios de comunicación a los que los alumnos tienen acceso en cuanto a las comunicaciones y cursos sincronizados y en el aprendizaje asincrónico. Evitar abrumar a los alumnos y a los padres pidiéndoles que descarguen o prueben una gran cantidad de aplicaciones y plataformas.  

8. Establecer las reglas para el aprendizaje a distancia y dar seguimiento al proceso de aprendizaje de los alumnos 

Definir con los padres y los alumnos las reglas del aprendizaje a distancia. Elaborar las preguntas, las evaluaciones y los ejercicios de formación cuyo objetivo es dar seguimiento al proceso de aprendizaje de los alumnos. En la medida de lo posible, utilizar los instrumentos mediante los cuales los alumnos podrán transmitir sus comentarios para no abrumar a los padres, pidiéndoles que los reproduzcan y los envíen.  

9. Definir el tiempo de duración de las unidades de aprendizaje a distancia en función de las aptitudes de autorregulación de los alumnos

Mantener un ritmo de enseñanza coherente con el nivel de autorregulación y de las aptitudes metacognitivas de los alumnos fundamentalmente para las clases que se difunden en directo. La unidad de aprendizaje de los alumnos de primaria no debe sobrepasar, de preferencia, los 20 minutos, y la de los de secundaria, los 40 minutos.  

10. Crear comunidades y favorecer los vínculos sociales 

Crear comunidades de docentes, padres y directores de escuelas para combatir el sentimiento de soledad o de sufrimiento del alumno y facilitar los intercambios de experiencias, así como el debate de las estrategias de gestión de las dificultades de aprendizaje. 

Organización de Naciones Unidas - ONU (2020). Diez recomendaciones para estudiar a distancia durante la emergencia del coronavirus. Sitio web oficial ONU. Sección Noticias. Categoría Cultura y Educación. Recuperado de: news.un.org

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