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El estrés de fin de año y cómo manejarlo

9 Noviembre, 2015

Si bien existen muchos períodos durante el año en los cuales nos vemos expuestos a estímulos estresantes, uno de los momentos en los que confluyen hitos importantes es el período noviembre-diciembre.  En estas fechas no solo nos encontramos con las compras y preparativos de las fiestas de fin de año, sino que también con el término del año laboral y escolar, y de la mano de esto, evaluaciones académicas y planificaciones laborales para el año que viene. Si bien, no podemos evitar que estos hechos se produzcan, sí podemos ir manejando nuestras reacciones ante ellos y así poder controlar de mejor manera nuestro comportamiento y reducir el riesgo del estrés al cual nos exponemos.

¿Qué es el estrés?

Según lo define la OMS es “un conjunto de reacciones fisiológicas que prepara al organismo para la acción”, es decir una suerte de respuesta interna ante estímulos externos. Es decir, este estrés puede ser tanto perjudicial para nosotros, como beneficioso, si sabemos cómo manejarlo (término conocido como eustrés, en el cual, se produce en el cuerpo un balance y no un desequilibrio, y favorece la adaptación al estrés de manera positiva). Por lo que, no deseamos sacar todo el estrés en nuestra vida, si no que aprender a manejar la forma en que lo enfrentamos.

Manifestaciones

Hay ocasiones en que nuestra adaptación al estrés no es positiva (Distrés) y se presentan síntomas que se anticipan y mantienen frente a períodos de “alerta”, donde persiste un continuo estado de tensión corporal y con esto, vemos ciertos efectos sobre nuestros organismos, algunos comunes motivos de consulta a distintos profesionales de la salud, como:
  • Dolores de espalda
  • Contracturas (principalmente en el cuello)
  • Cefaleas, de tipo tensional.
  • Alteraciones gastrointestinales, como constipación o diarrea.
  • Trastornos del sueño, síntomas depresivos y fatiga.
  • Sensación de agobio.

Manejando el estrés

Lo importante es entender que siempre estaremos expuestos a períodos cargados de cierta tensión y que lo importante es aprender a manejarlos y que de eso, quede una experiencia positiva. Para los más pequeños: -Escuchar y acoger las presiones a las que están sometidos los niños hoy. Mostrarle como los adultos vamos manejando las situaciones puede ayudarlos a elaborar sus propias herramientas. -Regular las expectativas: es necesario que los niños entiendan que lo que va ocurriendo a fin de año es resultado del progreso del mismo. Los padres deben exigir, pero también ser conscientes de los ritmos propios de cada niño y establecer límites a estas exigencias. Para los jóvenes: -Horarios: Es necesario tranquilizar a los jóvenes, de manera que si se sienten sobrepasados en el tiempo, puedan organizarse en lo que les queda, para que logren estructurar sus horarios. -Falta de estudio: Si sienten que aún tienen áreas en las que no han estudiado mucho, puede ser útil el repaso, pero siempre a la medida de cada uno, estudiando en horarios definidos dentro del día. -Sueño: Es necesario además, respetar los horarios de sueño y no estudiar en horas cercanas a este. Para los adultos: -Aprender a delegar, y jerarquizar qué tareas son las más importantes a realizar. De manera de tener anticipadamente una planificación de tareas. -Mantenerse fiel a los calendarios y meta propuesta. El que mucho abarca, poco aprieta. -Mantener espacios de descansos en el trabajo. -Llevar una dieta balanceada, cuidar la hidratación y actividad física, lo que puede en el futuro ayudar a enfrentar períodos difíciles. -Eliminar de la dieta cantidades excesivas de café, mate y te, ya que contienen sustancias que estimulan el sistema nervioso central y pueden alterar los ritmos sueño-vigilia. Deben también reducirse el alcohol y el tabaco. -Mantener espacios de esparcimiento con la propia familia, lo que finalmente, reduce el estrés de todo el grupo familiar. En caso de que las medidas generales de manejo no sean suficientes para controlar los síntomas, se sugiere la evaluación por un especialista para lograr enfrentar de mejor manera la situación. Artículo escrito por Dra. Berta Muñoz López, Psiquiatra Adultos y Directora Médico Unidad de Atención Clínica.   Fuente.

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