Convivencia Escolar
La convivencia en los centros de secundaria: un estudio de casos
27 Septiembre, 2012
Escrito por: Alejandro Campo, Alfonso Fernández y Jesús Grisaleña
"Una realidad inexcusable que deben afrontar los centros educativos es la de que ciertos patrones de comportamiento, válidos durante mucho tiempo, se han quedado actualmente anticuados y deben cambiarse. En este sentido, ideas como disciplina escolar, autoridad o convivencia en las aulas, son conceptos en continua discusión y revisión.
Esta investigación, realizada en el isei-ivei (Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa), presta atención a cómo se construye la convivencia y a cómo, una vez consolidada, se mantiene y se desarrolla en distintas situaciones. Para ello se ha acudido a la experiencia de tres centros escolares, que han dado respuesta de modo sistemático a los problemas que se les planteaban en este aspecto.
La metodología de investigación es el estudio de casos, que permite iluminar la situación de los centros, describiendo sus itinerarios de actuación.
Como denominador común de las conclusiones, se puede señalar que cada centro escoge un conjunto de medidas, un cóctel personalizado, derivado del diagnóstico que realiza de la situación. Hay una actitud de base que lleva a los centros a repensar la convivencia como elemento unificador y constructivo en su trabajo con el alumnado, con las familias y con la comunidad más próxima.
Las conclusiones básicas de este estudio se centran en la identificación y en la descripción de las estrategias utilizadas en la solución de los problemas de convivencia."
* No se analizó en el nivel del aula.
Este listado de factores del clima de relaciones y de convivencia se realiza a través de las aportaciones que procedan de investigaciones sobre el tema, del estudio de múltiples proyectos de convivencia, y de la experiencia previa de los investigadores.
Cada uno de estos factores lleva asociados varios indicadores que permiten introducir una medida cuantitativa del nivel que alcanzan. Se realiza un gran esfuerzo para que dichos indicadores midan y detecten, con precisión y sin ambigüedad, los elementos y los componentes citados («operativizar» las variables) (X. Coller, 2000).
Tomando como referencia el listado de factores, se elaboran los instrumentos para las entrevistas y para el cuestionario.
El cuestionario utilizado consta de 70 preguntas, de las cuales tres son de confirmación, cuyas únicas alternativas de respuesta son sí/no. Dos ítems son de respuesta múltiple, y pretenden conocer en qué lugares y en qué momentos se daban determinadas conductas. Los 65 ítems restantes son preguntas de percepción personal, que contestan en una escala valorativa (nunca, casi nunca, suficientemente, casi siempre y siempre) a la pregunta planteada. En ellas se indaga sobre temas claves de la convivencia.
Con el fin de obtener una visión global del conjunto de los resultados, se procedió a un agrupamiento de los diferentes ítems del cuestionario. En algunos casos, y teniendo en cuenta la especificidad de lo que se preguntaba, se optó por no agrupar algunos ítems, y por analizarlos de manera individual.
Las conclusiones más importantes a las que se llegó fueron las siguientes:
Valor medio de los ítems:
La mayoría de los ítems supera con claridad el valor medio de la escala, por lo que cuando algún ítem queda por debajo o no lo supera con amplitud, se considera como atípico y digno de especial atención.
Valores extremos de dos conjuntos de ítems:
Dos conjuntos de ítems sorprenden por sus valores extremos. Por un lado, el que alude a la participación del alumnado en la gestión del aula destaca por su bajo valor, lo que indica que éste no se siente suficientemente implicado en tales tareas.
Es también llamativa la percepción que los alumnos y alumnas tienen con respecto a las relaciones entre el profesorado de sus centros. En los tres casos, sin excepción, los alumnos y alumnas opinan que sus profesores mantienen entre ellos unas excelentes relaciones, mucho mejores que las suyas.
¿Qué opina el alumnado sobre la labor que el profesorado desarrolla? ¿Y sobre su propio rendimiento?:
El alumnado de los tres centros tiene muy buena opinión sobre la labor que sus profesores y profesoras realizan en el aula. En efecto, todos aquellos ítems que se refieren a las tareas que realiza el profesorado, obtienen una alta puntuación (coherencia y consistencia de las actuaciones, opinión sobre su actitud ante ellos, seguimiento y preocupación por sus estudios). Sin embargo, cuando los alumnos y alumnas opinan sobre su propio rendimiento y sobre las propias expectativas, las puntuaciones bajan de manera evidente.
Normas de centro y de aula:
Obtienen alta puntuación aquellos apartados que se refieren a la claridad, a la conveniencia y a la justicia de las normas tanto de centro como de aula, lo que indica el trabajo que los tres centros han realizado para que estas cuestiones sean entendidas como es debido por el alumnado.
Valoraciones del alumnado de 2.º y de 3.º curso:
A través de varios de los análisis realizados, se constata la existencia de una manifiesta regularidad en las valoraciones de los alumnos y alumnas de los cursos 2.º y 3.º de la eso.
Si se examinan estas diferencias con un nivel de confianza del 95%, se observa que en los tres centros investigados el alumnado de 2.º curso valora mucho más que el de 3.º los siguientes conjuntos de ítems:
1. Presentación
Una realidad ineludible que deben afrontar los centros educativos hoy en día es la de que ciertos patrones de comportamiento, que han sido válidos durante mucho tiempo, se han quedado obsoletos y deben ser cambiados. En este sentido, ideas como disciplina escolar, autoridad o convivencia en las aulas, son conceptos en continua discusión y revisión. Existe una tendencia generalizada y simplista que lleva a interpretar el problema de la disciplina en términos de comportamiento, vale decir, como una repetición no deseada e inaceptable de conductas de determinados individuos o de ciertos grupos. Por tal razón, a veces el debate educativo en torno a la convivencia y a la disciplina se ha convertido en un debate sobre la indisciplina, sobre la violencia escolar, sobre el deterioro de la convivencia, y sobre las respuestas organizativas para limitar y para contrarrestar los efectos del comportamiento antisocial y disruptivo en el seno de la escuela. En la investigación que aquí se presenta se quiere prestar atención a cómo se construye la convivencia y a cómo, una vez consolidada, se mantiene y se desarrolla en distintas situaciones. Para ello hemos acudido a la experiencia de tres centros escolares, que han dado respuesta de modo sistemático a los problemas que se les planteaban en este aspecto. Representan un pequeño pero significativo ejemplo de los centros escolares que están trabajando en este ámbito dentro de la Comunidad Vasca, amparados en las orientaciones y en los recursos del programa «Educación para la convivencia» de la Dirección de Innovación Educativa del Departamento de Educación del gobierno de dicha Comunidad Autónoma. Las conclusiones de varios estudios sociológicos (Elzo, 1996; Martín Serrano y Velarde Hermida, 1996) hacen ver que los niveles de violencia y los de conductas antisociales en las escuelas no son mayores que los de antaño. Cada escuela tiene una consistencia propia y por derecho se convierte en unidad de intervención, y, por consiguiente, en unidad de análisis. El clima escolar, ya sea positivo o negativo, no se explica sólo por el origen social de sus alumnos ni por el emplazamiento geográfico en el que esté la escuela. Escuelas, colegios e institutos comparables por su entorno y por las condiciones estructurales, tienen climas muy diferentes.Desarrollo
La escuela únicamente tiene capacidad de intervención en aquellas variables que controla, en los factores endógenos de convivencia, como son el clima del centro, las normas de convivencia y el tratamiento individualizado de personas y de problemas. Se le escapan o dicha escuela tiene una influencia indirecta y limitada en los factores exógenos que afectan a la convivencia escolar, como son la familia, el barrio, el grupo de amigos, los medios de comunicación (Fernández García, 1996).• 2.1 El desarrollo personal y social como objetivo educativo
Existen tres perspectivas de análisis que permiten discernir el grado en el que los centros educativos asumen el trabajo en convivencia:El proceso de socialización y el desarrollo moral
Los alumnos y las alumnas, al estar en contacto permanente con las agencias más importantes de socialización, son portadores de unas representaciones, de unas valoraciones y de unos sentimientos, que, en la interacción con la realidad social, dan lugar a unas actitudes ante el estudio, el trabajo, la amistad, la violencia... que se manifiestan en conductas o en comportamientos (Ayestarán, 1994). En la actividad pedagógica los centros utilizan dos caminos básicos de actuación. Por una parte, los educadores, como expertos morales, facilitan pautas culturales de valor y ayudan en el uso de los procedimientos de la conciencia moral en el trabajo de las tutorías y de otros programas transversales. Y, por otra, plantean la organización de la escuela desde un punto de vista formativo, como ámbito de participación activa y de ejercitación democrática.• La implicación en la actividad escolar
Otra mirada útil de los centros es la que dirigen al currículo, es decir, al diseño y al desarrollo de la actividad escolar. El currículo es parte central en los propósitos escolares, pero se contempla como el conjunto de experiencias vividas por el alumno o por la alumna en el área de la escuela. Del entendimiento que tiene del currículo la comunidad escolar, derivan acuerdos tanto explícitos como implícitos que guían las normas de convivencia. La asunción, ampliamente documentada, de que las escuelas como instituciones sociales tienen influencia importante en el comportamiento, en las actitudes y en los resultados de los alumnos, se fundamenta en numerosos estudios sobre la eficacia de la escuela.• El ejercicio del poder y la regulación de las conductas
Por último, también se intenta averiguar en qué medida la escuela asume la tarea de educar para la democracia y para el ejercicio responsable de la ciudadanía, que se canaliza mediante el desarrollo de las capacidades y de las habilidades para una convivencia social fundada en la solidaridad, en la participación y en el respeto, entre otros valores. Esta función democratizadora de la escuela cruza transversalmente, y compromete todos y cada uno de los procesos escolares.2.2 Clima y cultura escolar
La investigación acude a otro marco analítico para abordar el estudio de la convivencia escolar. Nos referimos a dos constructos teóricos derivados del examen sobre eficacia y mejora de la escuela: el clima y la cultura escolar.El clima escolar
El clima escolar es un factor de eficacia de primera importancia, de modo que es muy difícil que podamos imaginar, con un clima negativo, un buen centro con un buen rendimiento y con un buen nivel de convivencia. Esta idea cobra aún más fuerza si entendemos como eficaz un centro que consigue un desarrollo integral de todos y cada uno de sus alumnos, mayor de lo que sería esperable teniendo en cuenta su rendimiento previo y la situación socioeconómica y cultural de las familias.Cultura escolar
Por otra parte, la cultura escolar es una expresión que intenta captar los aspectos informales de organizaciones sociales como las escuelas. Fullan y Hargreaves (1992) la describen como «las creencias y las expectativas que se manifiestan en el modo de actuar de la institución escolar, con referencia particular a cómo se relacionan las personas».2.3 La dimensión de los procesos en los proyectos de convivencia
La mejora de la convivencia de los centros estudiados se sustenta en su capacidad interna de avance. Esta cultura se manifiesta, entre otros, en varios aspectos que funcionan de modo interrelacionado, tal y como se indica en la figura:3. DISEñO Y DESARROLLO DE LA INVESTIGACIóN
3.1 Tipo de investigación
Teniendo en cuenta el grado de desarrollo conceptual que existe sobre el clima de relaciones y de convivencia, se ha optado por realizar un estudio de tipo descriptivo, cuya finalidad genérica es «observar individuos, grupos, instituciones, métodos y materiales con el fin de descubrir, comparar, contrastar, clasificar, analizar e interpretar las entidades y los acontecimientos...» (Cohen y Manion, 1990). Entre la variedad de metodologías existentes, se elige el estudio de casos. Dicho estudio se plantea en términos fundamentalmente cualitativos, aunque con elementos cuantitativos de contraste. El hecho de combinar técnicas cualitativas y cuantitativas es frecuente en la literatura de investigación, tanto en el proceso de recogida de datos como en el análisis de los mismos (X. Coller, 2000).3.2 Selección de la muestra
Después de definir los criterios, se eligieron tres centros que trabajaban de forma positiva los problemas de convivencia, y que contaban con suficiente experiencia en este campo. La selección de la muestra, y después la de los informantes de cada centro, se realizó intentando conseguir la máxima información sobre los proyectos.3.3 Metodología
Se efectuaron entrevistas en profundidad, individuales y en grupo, a coordinadores del proyecto de convivencia, a equipos directivos, al profesorado, al alumnado y a las familias. Se entregó una encuesta a cuatro grupos de alumnos de cada centro. También se hizo un análisis documental. Todo ello se complementó con las observaciones directas del equipo de investigación.3.4 Objetivos e hipótesis de la investigación
Objetivos |
Hipótesis |
"Identificar y describir estrategias utilizadas por centros de Secundaria en su intento de mejorar la convivencia". "Describir y valorar el conjunto de medidas que cada centro educativo utiliza en relación con los problemas que se abordan y con el contexto de actuación". "Clasificar los factores del clima escolar en relación con su incidencia en la convivencia en los centros (factores básicos/secundarios) y en relación con su viabilidad (sencillos/complejos en la puesta en práctica)". Las variables de tipo interno (el ambiente tranquilo y ordenado, el liderazgo, el trabajo coordinado del equipo docente, etc.) son determinantes en la construcción de un clima ordenado de convivencia. Las circunstancias de tipo externo (condición social del alumnado, entorno del centro, etc.) facilitan o dificultan la tarea, pero no la determinan. | Las variables de tipo interno (el ambiente tranquilo y ordenado, el liderazgo, el trabajo coordinado del equipo docente, etc.) son determinantes en la construcción de un clima ordenado de convivencia. Las circunstancias de tipo externo (condición social del alumnado, entorno del centro, etc.) facilitan o dificultan la tarea, pero no la determinan. Existen estrategias comunes a todos los centros de Secundaria que trabajan en la mejora del clima de relaciones y de convivencia, y cuyo estudio permite obtener conclusiones sobre su eficacia |
3.5 La fiabilidad y la validez de la investigación
Se cuidaron de manera especial todos los aspectos relacionados con la validez y con la fiabilidad de la investigación, como requisitos necesarios para la obtención de conclusiones fundamentadas. La fiabilidad se aseguró mediante el establecimiento de pistas de revisión y la posibilidad de la réplica paso a paso; la validez interna, a través de la trian-gulación, del comentario entre investigadores, de las comprobaciones con los informantes, y de la recogida de materiales de contraste, fundamentalmente. A su vez, la validez externa se llevó a cabo por medio del muestreo relevante ya expuesto, de las descripciones en profundidad, y de una amplia recogida de información.3.6 Elaboración de los instrumentos de la investigación
El marco teórico propone un listado de componentes de la convivencia, y los factores que abordará la investigación:Listado de componentes de la convivencia | |
Centro educativo / aula | Colaboración del centro con... |
1. Regulación de las conductas. 2. Integración de todas las personas, y compromiso en una tarea compartida. 3. Relaciones. 4. Eficacia en los procesos de enseñanza/aprendizaje. 5. Dirección del centro y del proyecto de convivencia.* | 1. Sistema escolar. 2. Comunidad próxima. 3. Sistema social más amplio. |
Factores de la investigación | ||
Factores de contexto |
Factores temporales |
Resultados |
1. Historia y entorno del centro. 2. Historia y entorno del proyecto de convivencia. 3. Historia y entorno del trabajo en las aulas. | 1. Estrategias del centro para abordar la convivencia en los momentos iniciales. 2. Estrategias del centro para abordar la convivencia cuando | 1. Logros del trabajo en convivencia. 2. Sistemas de evaluación. 3. Perspectivas de futuro |
3.7 Tratamiento de los datos
Los datos obtenidos por medio de las entrevistas, de los cuestionarios al alumnado y del análisis documental, se analizan por separado. Revisión por parte de los participantes en las entrevistas de la información allí recogida: El significado que se da a los elementos y a los componentes de la convivencia de los centros pretende ser, desde el comienzo del estudio, compartido con los actores del mismo. Por ello, el equipo de investigación concede gran importancia a que cada participante en la entrevista se reconozca en las opiniones y en las valoraciones que los investigadores le adjudican en los primeros informes enviados a los centros. Este significado es también construcción compartida entre los investigadores. La forma de alcanzar los significados de los casos: Se ha procurado descubrir estos significados encontrando el sentido global de cada caso; para lograrlo se utilizan dos estrategias: la interpretación directa de los ejemplos individuales, y la suma de ejemplos hasta que se pueda decir algo sobre ellos como conjunto o como clase. Casi siempre los significados importantes surgen de las situaciones que se repiten con frecuencia, y que se consideran significativas para la comprensión del caso.3.8 Obtención de las conclusiones de la investigación
Como denominador común de las conclusiones, podemos señalar que cada centro escoge un conjunto de medidas, un cóctel personalizado, derivado del diagnóstico que realiza de su situación. Existe una actitud de base que lleva a los centros a repensar la convivencia como elemento unificador y constructivo en su trabajo con el alumnado, con las familias y con la comunidad más próxima. La identificación de las estrategias utilizadas por los centros constituye una de las conclusiones básicas de este estudio. Se agrupan y se ordenan siguiendo un modelo que las organiza según el grado de utilización en los tres, en dos o en uno solo de los centros. Aquellas que aparecen en los tres centros se clasifican, a su vez, de acuerdo con estos dos criterios:- Grado de credibilidad o de fiabilidad, que es la medida en la que la información obtenida está contrastada.
- Grado de valoración, que es la media de los valores que los entrevistados y los encuestados conceden a la estrategia.
- Potenciación de las relaciones positivas de consideración y de respeto.
- Implicación de la dirección del centro y de los coordinadores de los proyectos.
- Establecimiento de un clima de orden, de seguridad y de trabajo eficaz.
- Estimulación de la participación activa y de la implicación de las personas.
- Planteamiento de actividades específicas para las tutorías con el alumnado.
4. CONCLUSIONES
La técnica del estudio de casos no tiene como objetivo establecer generalizaciones, sino desmenuzar situaciones y analizar particularidades; en definitiva, poner la lupa en cuestiones concretas. Algunas evidencias pueden extrapolarse y llevarse a otras localizaciones similares. Desde este punto de vista, se describen los casos de los tres centros investigados. Por razones de espacio, en el presente resumen de la investigación sólo se describirán con brevedad los siguientes apartados de las conclusiones:4.1 Características y entorno escolar de los centros analizados
Existen varias diferencias entre los centros objeto de la investigación, que se manifiestan en la disparidad de ratios alumnado/profesorado, en la oferta de escolarización, en la estabilidad del profesorado, en la composición social del alumnado, y en los entornos físicos y culturales de los centros.4.2 Descripción de las situaciones previas
En los tres centros el determinante de la actuación es la percepción de un problema de mayor o de menor gravedad. Los tres se convencen de que es más útil intentar dar respuesta al problema que vivir con él. Los profesores y profesoras que imparten docencia en la Educación Secundaria Obligatoria (eso) y que provenían de los bachilleratos, no estaban acostumbrados a trabajar con el tipo de alumnado que accede a los nuevos niveles educativos, y, en algunos casos, esta situación se percibe como el origen de los problemas. El profesorado también señala una serie de cambios en las situaciones familiares de los alumnos y alumnas. Igualmente, se describe un cambio social general que hace más difícil y ardua la tarea de enseñar. Se percibe y se asume que desde los centros es necesario responder a los aspectos de desarrollo personal y social, junto a los académicos y cognitivos, aunque esto provoque algunas resistencias entre sectores del profesorado. Los tres centros coinciden en resaltar la colaboración sistemática recibida por el/la asesor/a correspondiente del Berritzegune2.4.3 Conclusiones sobre el cuestionario del alumnado
La investigación valora las percepciones de los alumnos a través de entrevistas grupales, y a través de cuestionarios individuales a los alumnos de 2.º y de 3.º de la eso3 . En la siguiente parrilla se reflejan los cursos y los alumnos de cada centro a los que se les suministró el cuestionario:
2.º ESO |
3.º ESO |
|
Centro A |
34 |
36 |
Centro B |
59 |
57 |
Centro C |
35 |
41 |
- 1. Implicación del alumnado en la gestión del aula.
- 2. Coherencia y consistencia en las actuaciones del profesorado.<
- 3. El alumnado recibe cursos de formación en convivencia.
- 4. Opinión del alumnado sobre la estimulación y sobre la preocupación del profesorado hacia sus estudios.
- Amistad entre compañeros: para los tres centros es el que obtiene mayor valoración.
- Relación entre profesores: el ítem que valora las relaciones entre los profesores obtiene en los tres centros un valor muy elevado.
- Conocimiento de la normativa de aula: el ítem que pregunta sobre el conocimiento que tiene el alumnado de las consecuencias de incumplir la normativa de aula, se encuentra también entre los de mayor valoración.
- Trato igualitario del centro/ayuda que ofrecen los profesores: para los ítems que valoran los anteriores aspectos, las respuestas de dos de los tres centros se encuentran entre las cinco más valoradas.
- Si este análisis se realiza sobre los cinco ítems peor valorados, la clasificación queda de la siguiente manera:
- Atractivo de las clases y estímulo hacia el aprendizaje: los resultados de los tres centros coinciden en la más o menos baja valoración sobre el grado en el que los profesores hacen sus clases atractivas. Relacionado con esto, el ítem que interroga sobre el estímulo que obtienen los alumnos y alumnas por el aprendizaje consigue en dos centros valores por debajo del tres.
- Participación en la elaboración de la normativa de centro: también en dos centros obtiene valoraciones ligeramente superiores al tres la pregunta sobre la participación de los delegados y delegadas en la elaboración de la normativa de centro, mientras que para el tercer centro se queda por debajo de esa cifra.
- Normativa de aula: los ítems relacionados con esos valores son bastante inferiores a otros.