La felicidad, el arte y la conciencia ambiental destacan como generadores de aprendizaje en primera infancia

La educación de la primera infancia ha cobrado gran relevancia en las últimas décadas, lo que se evidencia actualmente en hechos importantes como que la educación parvularia es reconocida como el primer nivel del sistema educativo formal de nuestro país, Chile. Así también, el desarrollo de competencias y habilidades para enfrentar la vida se ha constituido en el énfasis formativo de los programas educativos de la primera infancia.

En este sentido, actualmente la educación de la primera infancia intenta generar aprendizajes desde diferentes ámbitos, relevando el rol del juego en la vida de niños y niñas, desde una perspectiva integral. Aspectos como el arte, el medio ambiente, la felicidad, la formación ciudadana, la diversidad, entre otros, se transforman en potentes generadores de aprendizajes desde los cuales se desarrollan múltiples habilidades de manera transversal.

Una muestra de ello es lo que presentaron diversos jardines infantiles dependientes de la corporación de educación de la Municipalidad de La Florida, destacando aspectos tan relevantes para la vida actual como ejes formadores y generadores de aprendizajes de sus niños y niñas.

Sala de clases e intangibles

De acuerdo a lo que explican expertos en reputación corporativa, los conceptos intangibles se traducen en valores sociales para darle un sello e identidad de marca a los establecimientos educacionales. Estos son la piedra angular para generar cambios profundos en el aula y así mejorar los indicadores de desarrollo docente, lo que luego se traspasa a la enseñanza de los niños y niñas.

Por ejemplo, el jardín infantil el Naranjito, al trabajar la educación ambiental y la sustentabilidad, plantea un proyecto educativo con sello holístico, integral, de amor y respeto por todo lo que rodea al ser humano, con un fuerte componente de dejar una huella verde “en nuestro camino”. A su vez, la escuela de Párvulos Samorito, de la mano del arte, pretende establecer una dinámica de autocapacitación a través de la investigación de ciertos artistas, para ir replicando sus técnicas.

Y respecto a la felicidad en el aula, esta se concibe como “hacer del espacio físico un lugar de exploración, descubrimiento, aprendizaje, así como un lugar con límites distinguibles, pero que tienen elementos que proporcionan identidad”, explican desde del jardín infantil, Marcela Paz.

La escucha activa

Por su parte, el jardín infantil San Esteban, propicia el visibilizar el ejercicio ciudadano. Una de las aristas que trabajan, tiene que ver con la “escucha activa”, entendida esta como la habilidad para ponerse en el lugar del otro y comprender las intenciones, deseos y peticiones entre pares, lo que va ligado a la colaboración entre estudiantes y docentes, como un todo global.

En la misma línea, el componente de la “asamblea”, busca oír diferentes opiniones, ideas y estrategias, para contribuir y resolver situaciones y problemas en el día a día.

Agenda País (2020) La felicidad, el arte y la conciencia ambiental destacan como generadores de aprendizaje en primera infancia. Diario digital El Mostrador. Sección Agenda País. Chile. Recuperado de elmostrador.cl

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