Inclusión
Atención educativa a la diversidad. Una filosofía, un desafío
27 Septiembre, 2012
Escrito por: Teresita Durán V. Profesora de educación primaria, licenciada en educación especial y master en psicología y orientación vocacional. Centro de Recursos de Información y Orientación para impulsar la Integración Educativa en la ciudad de Campeche, Cam. México
"La autora presenta una propuesta docente que permite los profesores y a la comunidad educativa construir una escuela capaz de aceptar y educar a todo el alumnado para crear una clase en ambientes integradores a fin de garantizar una atención educativa de calidad para los niños, niñas y jóvenes con necesidades educativas especiales, asociadas o no a alguna discapacidad. se aborda una perspectiva para reflexionar y buscar juntos, la construcción de un nuevo paradigma de pensamiento y acción pedagógica, en torno a la atención educativa de la diversidad”
Introducción
Garantizar una atención educativa de calidad para los niños, niñas y jóvenes con necesidades educativas especiales, asociadas o no a alguna discapacidad, es el compromiso de las autoridades educativas, directivos, maestros y profesionistas involucrados en la atención de esta población en edad escolar. Si el objetivo externo del quehacer educativo, y lo que da sentido al mismo, es contribuir al mejoramiento de la calidad de vida -actual y futura- de los educandos, la escuela sí puede contribuir a que su labor se centre en el desarrollo de las personas; para ello, es necesario, un gran esfuerzo en el sentido de cambiar actitudes en los docentes, para el reconocimiento de las características individuales y necesidades específicas de los alumnos, para que todos sean incluidos en los procesos de aprendizaje. Así lo sugiere María Sirley, cuando apunta que "(...) es necesario que comprendamos que la calidad en la educación significa el reconocimiento al derecho de todos a ser diferentes, al derecho de aprender según sus potencialidades..." (2003, p. 40). Por estas razones, en el presente trabajo se aborda una perspectiva para reflexionar y buscar juntos, la construcción de un nuevo paradigma de pensamiento y acción pedagógica, en torno a la atención educativa de la diversidad.Antecedentes
Desde hace algunos años, la UNESCO y los gobiernos de algunos países, entre ellos México, han manifestado interés en crear nuevas oportunidades para los niños que por alguna circunstancia no han tenido acceso a la educación, tal como sugiere la Conferencia de Salamanca (1994), cuando reafirma el principio de "Educación para todos", pugnando por una práctica que asegure a los niños y jóvenes con discapacidad ser integrados para ocupar el lugar que por derecho les corresponde, para estar en las aulas de las escuelas. En nuestro país, la actual política educativa y social aspira a un desarrollo pleno de sus hombres y mujeres, por eso, la educación especial tiene el compromiso social de ofrecer una atención educativa de calidad a los alumnos que presenten necesidades educativas especiales con o sin discapacidad; orientando sus prácticas al desarrollo de capacidades, habilidades y actitudes; así, como a la búsqueda de aprendizajes para mejorar las oportunidades de desarrollo, autonomía, socialización y convivencia de los alumnos. Hoy en día, la misión de los servicios de Educación Especial es......favorecer el acceso y permanencia en el sistema educativo de niños, niñas y jóvenes que presenten necesidades educativas especiales, otorgando prioridad a aquellos con discapacidad, proporcionando los apoyos indispensables dentro de un marco de equidad, pertinencia y calidad, que les permita desarrollar sus capacidades al máximo e integrarse educativa, social y laboralmente. (Programa de fortalecimiento de la educación especial y de la integración educativa. 2002, p. 31).
Desarrollo del tema
Perspectiva actual
Aprender juntos sin exclusiones es un principio democrático para la educación actual, es abrir las puertas de los centros educativos a todos los menores en edad escolar; independientemente de sus condiciones físicas, intelectuales, emocionales, socioeconómicas, étnicas o de alguna otra índole; incluso aquellos con necesidades educativas especiales, tienen derecho a recibir educación. Bajo esta perspectiva, la educación fortalece su esencia humanista. La política educativa actual se apoya en una base filosófica-ideológica, pues concibe a la escuela como agente de cambio, enmarcada en un nuevo modelo de sociedad incluyente, que considera tres aspectos básicos: a) Respeto por las diferencias b) Derechos humanos e igualdad de oportunidades c) Escuela para todosEstos principios filosóficos constituyen la base ética y moral que permite pensar en un ideal de hombre, de ciudadano que se ha de formar en las aulas con una serie de atributos y características, de habilidades y capacidades, que le permitan integrarse a la sociedad. (Antología de educación especial. Evaluación del factor profesional. 2000, p. 38).
Escuela para Todos
Un valor fundamental de esta escuela es educar respetando las diferencias, y al hacerlo, logramos una escuela más abierta a la comunidad, más participativa en la atención de los alumnos con necesidades educativas especiales; una escuela que responda a diferentes necesidades, cuya organización permita buscar alternativas para solucionar posibles problemáticas y encontrar nuevos servicios y apoyos, para fortalecer la actualización docente, la vinculación con los padres de familia y la comunidad. No cabe duda, el reto y compromiso social que se plantea para las escuelas inclusivas sugiere que estén preparadas para aceptar y educar al alumnado con diferencias, con un sentido comunitario, de convivencia, apoyo mutuo, etc., para ello, es necesario recurrir a una serie de principios y valores para asegurar una educación basada en la diversidad, según Stainback y Stainback, existen algunos principios que orientan el reconocimiento de las diferencias en una escuela abierta a la diversidad, y esas premisas son: a) Establecer una filosofía escolar basada en el principio democrático e igualitario. b) Incluir a todas las personas implicadas en la educación (maestros, padres, alumnos...) en la planificación y toma de decisiones. c) Adaptar el currículo según las necesidades del alumnado. d) Mantener flexibilidad en las estrategias metodológicas de enseñanza. e) Acentuar los procesos de interacción, para hacer posible una educación de calidad para todos. El conocimiento a fondo de las diferencias y una actitud abierta hacia ellas, asegura igualdad; la flexibilidad en las formas de trabajo permite la equidad; ambos conceptos, igualdad y equidad son valores que permiten considerar la diversidad en sí misma, como una fuente de aprendizaje; valorar positivamente la diversidad, es valorar a los alumnos y alumnas por lo que son como personas y lo que pueden hacer, más que por lo que tienen o no tienen.Integración educativa, retos y principios
La integración educativa es el proceso que implica que los niños, las niñas y los jóvenes con necesidades educativas especiales asociadas con alguna discapacidad, con aptitudes sobresalientes o con otros factores estudien en las aulas y escuelas regulares, recibiendo los apoyos necesarios para que tengan acceso a los propósitos generales de la educación. (Programa Nacional de Fortalecimiento a la educación especial y a la integración educativa. 2002, p. 36).La integración no es en absoluto una novedad, porque seguramente, algún maestro de la escuela regular en educación básica, ha atendido niños con discapacidad en su salón y ha empleado diversas estrategias para integrarlo. Actualmente en algunas escuelas públicas se está viviendo este proceso, en el cual los maestros de educación especial son parte del equipo de profesionales, que participan en la atención y apoyo de los alumnos con necesidades educativas especiales. Este modelo educativo, no intenta crear angustia o desmotivación en el colectivo de maestros de educación básica, sino ofrecer nuevas oportunidades de aprendizaje y experiencia, ante las nuevas demandas de atención de los alumnos; todo ello implica reflexionar e integrar a sus esquemas otras formas de enseñanza, favorecer la diversificación metodológica para que cada alumno participe en el aula, empleando al máximo sus posibilidades, en situaciones variadas y valiosas para todos; no se trata de que el maestro trabaje más, sino que trabaje de manera distinta. Desde luego, los maestros no deberán enfrentar solos este reto, pues la integración requiere del trabajo colaborativo, del apoyo mutuo entre compañeros, del liderazgo de los directores, del personal de educación especial, de los padres de familia y de las autoridades educativas. La integración no implica únicamente, la idea de la inserción escolar, sino lograr el acceso y permanencia exitosa de los alumnos con necesidades educativas especiales en las escuelas. La integración es responsabilidad y compromiso de la educación básica, de ahí que es importante la participación comprometida de autoridades, maestros, padres de familia, alumnos y comunidad educativa en su conjunto. La integración educativa, es una oportunidad para la comunidad educativa de crecer como personas y de fortalecerse como equipo de trabajo. Para los alumnos, la integración es de gran beneficio, pues constituye una experiencia educativa y social para desarrollarse como personas.